[Que suerte que ya no estoy tan sola como creía, encima, la suerte de que la nueva vecina hable español me alivia bastante. Agarro la otra copa en la cocina junto al vino y llevo todo al living, cuando justo suena el timbre. Voy hasta la puerta con total normalidad y la abro. Veo una chica, diría casi mi misma edad, simpática con cabello ondulado marrón, unos aritos generosos, no tan alta y con una sonrisa de oreja a oreja.
-Penélope, un gusto soy Regina, tu nueva vecina -se tira a mi para abrazarme fuerte- -Regina, un gusto. Podes llamarme Penny -le sonrío y la invito a pasar al departamento.]
Ella pasa mientras yo cierro la puerta. Ella camina por el living mientras me acerco a la mesa a servir un poco de vino,
-La decoración esta muy buena. El mio todavía tiene varias cosas para cambiar.
-Si, la verdad que tuve suerte de que me dieran el departamento amoblado y con buen gusto. ¿Vos estas alquilando el tuyo? –Tratando de saber mas sobre mi futura vecina/amiga-
-Lo compré. Mi papá falleció hace menos de un año, con mi mamá nos pusimos de acuerdo y me dio la parte que correspondía. Ellos sabían que tenía muchas ganas de comprar mi departamento y tuve suerte de comprar algo bueno acá en Italia, era un deseo grande que tenía de vivir acá. ¿Vos como llegaste hasta acá?
-Yo vine por trabajo, mañana justo tengo la entrevista en el edificio que esta instalado acá. Sé que es por tiempo indeterminado, así que hasta ahora, disfruto estas mini-vacaciones. Llegue hace una semana y calculo que la próxima ya estaré trabajando.
Agarro las copas de vino y le acerco la de ella.
-Por nuestra nueva amistad – y levanta la copa para brindar-
-Por la nueva etapa de vida –sonrío y hacemos sonar los cristales.
Mientras charlamos de cosas básicas como dos personas que recién se conocen, suena un celular, pero me doy cuenta que el mio no es. Regina se exalta y saca de su bolsillo el celular, mira el visor y atiende, me lanza una mirada de preocupación, pero parece que no es nada grave, mientras ella habla yo voy a servirme un poco mas de vino. Cuando me vuelvo hasta el sillón, ya había terminado de hablar, me mira con una cara de nostalgia
-Tengo que volver a casa, ya es tarde y me olvide que tengo que preparar unos escritos
-Pero ¿Esta todo bien?, te noto algo preocupada
-Si, todo bien. Es que mi compañera de piso Mailén me aviso esta en camino, hoy me toca cocinar. Ella odia llegar y no encontrar la comida lista. Así que mejor me voy yendo, antes de que ella se enoje y vos te desveles
– ¡No hay problema! Antes de que te vayas, agenda mi celular así mañana cuando estén libres, nos juntamos y vamos a tomar unos tragos
-Me encanto la idea, le voy a contar a Mailén, ella es una bebedora compulsiva, no creo que desista a esta invitación –lanza una risa picara
Yo aprovecho para agarrar el talón de post it, para escribirle mi celular. Ella ya esta esperando al lado de la puerta y me apresuro para abrirla mientras le doy el papel
-Fantástico guapa!. Mañana te llamo cuando estemos libres y organizamos a donde vamos. Hay unos bares muy buenos cerca de acá, serás nuestra invitada de honor –se acerca efusiva y me abraza
-Fue un placer compartir unas copas con vos, mañana te llamo.
Le sonrío mientras camina hasta el ascensor. La saludo con la mano y cierro la puerta con llave. Agarro las copas que están sobre la mesa y me las llevo hasta la cocina. Mientras las lavo, analizo la situación de recién. Realmente me gusto conocer a alguien nuevo, más que hable español. Es un avance para mí, desde que llegue no hable más que con las personas que me atendían en los locales y encima en italiano. De acordarme me hecho a reír fuerte.
Miro el reloj, ya va a ser casi medianoche, creo que seria mejor irme a la cama para estar relajada. Aunque mañana solo será una breve presentación empleador-empleado, cualquier cosa me pone nerviosa por más básica que sea. Apago la luz de la cocina y a medida que voy haciendo mi camino hasta la habitación controlo que este todo apagado, cerrado. Largo un suspiro intenso y cierro la puerta de mi habitación, antes voy a ir al baño para mi aseo personal y ponerme ligera de ropa para acurrucarme entre una suave sabana y muchos almohadones de colores.
Unos segundos antes de apagar mi velador, me quedo en un estado de trance, donde vuelve a mi, la imagen del Hombre ojos color cielo, la misma que vi en la bañera, en la cafetería. Me persigue a todos lados, no quisiera que me interrumpa en mis sueños. Siento el aroma de los jazmines que esta completamente impregnado en mi habitación. Sacudo mi cabeza y prefiero apagar el velador para zambullirme en mis sueños.
Estoy de regreso a casa, lo primero que hago cuando llego -ademas de cerrar con llave la puerta- es ir en busca de un florero para los jazmines, ni loca los tiraria. Me da mucha ternura haber recibido el ramo, pero rabia a la vez de no saber quien es. Voy directo a la cocina a buscar dentro del mueble donde hay una variedad de cosas desde platos hasta un paquete de sal. Lo veo en el fondo de la segunda repisa y lo agarro con cuidado, a veces tengo mala suerte que todo lo que toco se me rompe. Lo lleno con agua y sumerjo los jazmines. Camino hasta el living pero no me motiva dejarlos en la mesa decorativa junto a los sillones, tengo ganas de que esten cerca mio, asi que los dejo en una de las mesitas de luz de la habitación. El aroma que tiene los jazmines me hacen volar de felicidad. Todavia es temprano para cenar, asi que voy a optar por un baño tranquilo para analizar un poco lo que me paso a la tarde.
Abro la puerta del baño, enciendo la luz. Veo mi bata ahí colgada asi que no habia mucho por hacer mas que ponerle el tapón a la bañera y girar el grifo asi va llenandose. Miro sobre una pequeña repisa unas sales de baño, aceites. No se me ocurre mejor idea que agarror y hacer una mezcla en la bañera que esta casi lista para sumergirme. Antes de sacarme la ropa, voy hasta la puerta donde hay un aparatito que esta ubicado al lado de la tecla de encendido de luz. Sigo sin creerlo, ¡por fin tengo un baño con música!. Programo algo relajante y comienza a sonar a un volumen moderado, ideal para dejarse llevar.
Me saco la ropa y la dejo sobre un mini-canasto, cierro el agua y chequeo que este todo bien, una pierna ya esta dentro de la bañera, paso la otra y me deslizo suave entre el agua serena. Apoyo mi cabeza con cuidado y cierro mis ojos. De fondo suena Chopin «Nocturno Opus N°2» -si mal no me falla la memoria- mientras me dejo llevar por la música, vienen a mi pequeños flashes, y en todos aquella mirada intensa, que parece penetrar por completo mi cuerpo. Sigo sin comprender que sucedio hoy, quién es aquella persona que esta enviando cosas. Tengo una pista, sus iniciales TM, pero es algo dificil de decifrar. -Justo a mi que me gusta hacer de detective-. Pero esta vez, me es diferente. Me interesa saber, pero me da miedo a la vez. Será porque no tengo en quien refugiarme, porque estoy lejos de todo lo que era mi vida cotidiana. Estoy en otro país, sola, no conozco a nadie pero alguien conoce más de mi, que yo misma. Todo es tan extraño, desde que llegue me siento rara, es un rompecabezas que se desmorono apenas pise Italia y creo que cada pieza, se va a ir ubicando con el correr de los días, con el correr del tiempo.
Un escalofrío nuevamente esta presente en mi, ante la imagen nitida de aquel hombre inmovil, mirandome fijamente. Siento como el aroma de los jazmines se apoderan de mi, y mas hundida en el agua estoy. Queriendo no abrir mis ojos, queriendo acercarme a esa imagen que parece tan lejana, me dejo llevar y aquel hombre parece acercarse lentamente, cada paso que da es un latido de mi corazón más intenso, una suave brisa delante de mi cara, una nostálgia que brota desde mi alma pero una alegria incontenible.
Estamos frente a frente, aún sosteniendo la mirada, su sonrisa encantadora me deslumbra. En ese silencio profundo, acaricia con su mano mi mejilla, siento su calor interno, una ternura infinita, su aroma es como el del jazmín que nos envuelve. Una luz radiante ilumina todo su cuerpo. Mi sonrisa se va dibujando lentamente mientras una lágrima empieza a caer. Sus dedos la detienen antes de que termine su recorrido. Su otra mano pasa por mi cintura, me sostiene fuerte. Sin dirigirme la palabra, solamente habla con su mirada profunda. Cierro los ojos cuando su boca parece aproximarse a la mia para sellar con un beso toda esa distancia que sentí al principio, a milimetros de su boca, mi cuerpo tiembla y un calor fuerte se desprende…
Ya pasaron varios días desde el desayuno misterioso que llego a mis manos. Todavía tengo muchos interrogantes pero sin ninguna respuesta. No logro encajar las piezas del rompecabezas. No tuve contacto alguno con alguien como para sospechar y tener un 1% de probabilidades. Ni ese gusto puedo darme. Algo frustrada, me acuerdo que mañana Jueves a las 10.00hs tengo una entrevista informal, con mi futura «JEFA». Ya me habia olvidado que mi llegada a Italia, era justamente por trabajo y tiempo indeterminado. Me acuerdo que eramos cuatro las personas que teniamos chance de viajar, y la única que tenia todo en regla para hacerlo en menos de una semana ¡ERA YO!.
Y acá estoy, sola, a miles de kilometros de distancia. En un departamento más que acogedor, una vista simple pero agradable, sin conocer a nadie y lo peor de todo, que parezco muda tratando de comunicarme con los habitantes de este pais, por verguenza no hablo mucho italiano, pero tampoco soy una experta. Me va a llevar tiempo en adaptarme y soltarme.
No pasó ni una semana desde que pise el aeropuerto de Fiumicino y todo me parecia familiar, no tuve mucha suerte de tener a una persona esperando por mi con un cartelito, al menos discreto que diga mi nombre completo y sepa que estaban esperandome. Me conformo con saber que en unas semanas, no voy a ser un bicho raro en esta ciudad, voy a familiarizarme un poco mas con mi entorno.
Escucho el sonido de unas campanitas, es mi celular que esta sobre la mesa. Distingo que es un mensaje de texto, asi que lo agarro para leer de que se trata.
DE: Desconocido
MSG:
«Es muy largo el camino, es el amor LA SEÑAL!»
Abro mis ojos de tal forma que parecen saltarse, similar al personaje de «la mascara», Lo vuelvo a leer pero sigo sin comprender ¿QUIÉN ES?. Hablo con mi inconciente, diciendo que tal vez, es alguien que se equivoca de persona. Pero, no cuadra la situación, el mensaje por esas casualidades de la vida, esta escrito en español, alguien sabe que hablo español y para que me suene mas amistoso, lo hace en mi idioma. De mas esta decir, que este celular y numero, es pura y exclusivamente de acá y diria que nadie tiene mi numero nuevo. Sospecho que tal vez, sea alguna broma de mi Jefe de Argentina, pero dudo que se ponga a hacer esas cosas. Desconcertada aun mas despues de este mensaje, dispongo de unos minutos, para intentar responder y ver si tengo alguna respuesta nueva. Apreto la pantalla para escribir mi mensaje:
-«MUY LINDA LA FRASE, PERO CREO QUE TE ESTAS EQUIVOCANDO DE PERSONA»
Lo leo una vez para asegurarme de que sea claro y apreto «Enviar». El globito con mi mensaje se plasma debajo del que recibi y la barra de envio esta casi terminando, cuando de golpe. Mi mensaje aparece con un sigo en rojo (!) y un cartel de ERROR:
«DISCULPE, ES IMPOSIBLE ENVIAR ESTE MENSAJE»
Me pongo de todos los colores, no puede estar pasandome esto a mi. Cierro la ventana de mensajes y abro la aplicación donde me dice toda la información de mi plan. Chequeo
-Tiene 220 minutos libres para hablar (Dispone di 220minuti gratuitiper parlare)
-Mensajes de texto: 322 (SMS) / Mensajes Multimedia: 350 (MMS)
-Internet: Ilimitado (Internetillimitato)
PARA MAYOR INFORMACION COMUNICARSE AL 133 / (Per maggiori informazioni contattare 133)
Cierro la aplicación, frustrada, miro la hora son 16.35, bloqueo mi celular y lo llevo conmigo hasta la habitación, creo que seria mejor tomar un poco de aire, agarro mis zapatillas rojas, busco el bolso donde tiro mi celular y saco el ipod, me acomodo un poco. Ya lista, voy rumbo a la puerta sin antes olvidarme las llaves que estan colgadas. Doy un giro y abro, miro para ambos lados, todo muy tranquilo. Cierro la puerta despacio, y voy hasta la escalera para bajar hasta PB. Solo son dos pisos, pero son mas rapidos bajarlos que subirlos. Noto que en cada piso, las paredes estan pintadas de un color diferente, es divertido distinguir el piso por el color.
Ya delante a la puerta que da a la calle, enciendo el ipod y marco reproduccion aleatoria, auriculares ya puestos, abro la puerta, se respira un calorcito agradable, el sol pega en el asfalto moderadamente. Miro para ambos lados, noto que hay un par de autos estacionados, demasiada tranquilidad en esta cuadra. Voy a ir esta vez para mi izquierda, llegando a la esquina y un par de cuadras mas, tengo Vía Albalonga. Ando con ganas de caminar sin rumbo, pero eso si, voy a parar a tomar algo un ratito antes.
Creo que a unas cuadra, por esta misma calle hay un lugar agradable para tomar algo -sea helado o cafe- y no estaba equivocada, el cartel de «POMPI PASTICCERIA« en grande esta algo poblado el lugar, pero hay espacio para una persona más.
Miro y trato de ubicarme lejos de la gente que hay en una mesita para dos. Me siento, mientras voy apagando el ipod y lo guardo en el bolso que lo cuelgo al costado de mi silla. Ya tranquila, agarro la carta y busco que voy a pedir.. No tarda mucho mas de 3 minutos, cuando se acerca el mozo para atenderme..
–Buon pomeriggio
Sonrio algo nerviosa y le pido como mejor me salgan las palabras -dejando entrever que no soy de acá-
–Un cappuccinoe una porzione ditiramisú-estoy antojada de probar el tiramisú por lo visto, es la especialidad acá, aunque no hay como el que venden cerca de casa-
El mozo sonrie y se retira.
Aprovecho para sacar mi cuaderno del bolso con la lapicera, me dieron ganas de escribir, cuando estaba a punto de apoyar la punta de la lapicera en la hoja, escucho un murmuro importante, levanto la vista, habían varias personas rodeando a alguien que no distingo a ver quien es, pero ya varias chicas estaban con sus celulares encendidos para sacar fotos o filmar. No me preocupo mucho, intento centrarme en mi cuaderno y escribir, pero siento un escalofrío fuerte en mi cuerpo y pareciera que estoy congelada por un momento mirando a ese pequeño grupo de chicas, cuando un hombre alto asoma un poco la cabeza entre ellas y en ese instante las miradas, a lo lejos, se chocan..
Amanecía, el sol apuntaba justo en el ventanal que hay en la habitación. Todavía algo dormida intento desconectarme de mis sueños y arrancar con la realidad, o sea, mi vida cotidiana. Un estirón mas y me esfuerzo para levantarme. No suelo tener buen animo cuando despierto, excepto, cuando sueño cosas lindas o haya vivido algun hecho especial la noche anterior. Este día, era la excepción. Sentí un ruido, alguien parece haber golpeado mi puerta acompañando con el sonido del timbre. Me arreglo un poco y camino -semi dormida- hasta la puerta principal del departamento. Antes de emitir algun sonido, acerco mi ojo a la mirilla, habia alguien parado de espalda. Agarro las llaves que estaban colgadas, la ubico en la cerradura y giro para destrabarla. Abro apenas un poco para ver que necesitaba el caballero.
-¿Si?.. -Se da vuelta con una paquete y un sobre- -Buongiorno signorina, devo portare questo a te (Buen día Señorita. le traigo esto para usted) -Sonrie y extiende el regalo hacia mi, para que lo agarre- -Non le ho richieste (No he pedido nada) -Miro de forma extraña al muchacho- -Lo so, qualcuno ha mandato a te (Lo se, lo ha enviado alguien para usted) -Vuelve a sonreir e insiste que lo agarre-
Dudo un momento, abro un poco mas la puerta y agarro el regalo. El chico se sonrie y se retira como si nada. Yo cierro la puerta de una patada y llevo el regalo hasta la mesa. Lo empiezo a abrir con cuidado (no me gusta romper el envoltorio tan brutamente). El regalo era un desayuno, me sorprendio un poco, no esperaba que alguien me envie un desayuno y menos para «no compartirlo». No terminaba todo en ese regalo, aprovecho y voy a la cocina para calentar el café, pero antes, agarro el sobre que acompañaba al desayuno. Lo abro con cuidado, no tenia remitente. Mientras enciendo la hornalla y pongo la cafetera a calentar, saco del sobre una carta, me apoyo sobre la mesada y empiezo a leerla..
«Hoy amaneci con el deseo firme de continuar. Nunca tuve tantas ganas de entregarme hasta el final, El temor se a ido, descubri el amor en ti. Escuchando mis latidos que gritaban fuerte tu nombre, me basto sentir para entender y saber adonde ir. No se porque supe desde siempre que serias para mi, que eras lo que dios habia mandado para hacerme feliz. Este amor eterno es mi bendicion. Un presentimiento, esto es para siempre amor..
Cansado el mundo pide que lo salve. Mi frente arde y yo espero a que tú vengas. Blancas azucenas crecen en mi pecho y hasta ti arrastra su aroma este viento. Hoy nace un niño y el otoño me sonríe. Y la ciudad febril tirita ante este encuentro. Todo conduce a ti, mientras tanto espero. Y yo que no creía en el destino. Mientras tú llegas las horas pasan clavando en mi sus agujas y en la penumbra me despierto buscándote a tientas. Mece mi cuerpo como a un árbol la tormenta y en su corteza tallo tu nombre. Mientras tú llegas, un hombre espera inquieto, escribe en el cielo blancos recuerdos del futuro y mil aves vuelan para llevarte una radiante azucena, promesa de un tiempo mejor.
Ya no sé que inventar para llenar las horas. Todas las cosas se empeñan en hablarme de ti. Y, así, te escribo, me hago un té, me duermo. Salgo de casa, me digo que estoy bien, me miento, feliz, sonrío y la tormenta se despide y en mi sonríen todos los hombres del mundo. En ti descubro siempre todos los misterios, la calma que atenúa este implacable vértigo. Y todo se ha de salvar si apareces tú. La vida es una y una es la respuesta, mi piel se quema sin tu suave sombra. Te nombran las ciudades que pisé y en cada esquina encuentro tu acertijo. Si vivo fue porque siempre esperé para entregarte mi pecho desnudo. El futuro me ha nombrado con tu voz, en ti todo encuentra una razón. Todo comienza en ti, el resto de mi vida y la razón de abrir cada ventana, la canción que resuelve mis dudas, mi delirio y mi cura. Y todo acaba en ti, los besos, cada fiesta, la raíz que bebe mis dolores, mi febril costumbre de buscarte, mis días y este hambre de ti.
Ya no importa cada noche que espere, cada calle o laberinto que crucé, porque el cielo ha conspirado en mi favor y en un segundo de rendirme te encontré. El corazón se me desarma, me haces bien, enciendes luces en mi alma. Creo en ti y en este amor que me ha vuelto indestructible, que detuvo mi caída libre. Creo en ti y mi dolor se quedo kilómetros atrás, y mis fantasmas hoy por fin están en paz. Cuando estaba a medio paso de caer, mis silencios se encontraron con tu voz. Te seguí y rescribiste mi futuro, es aquí mi único lugar seguro. Cada blanco de mi mente, se vuelve color con verte. Y el deseo de tenerte, es más fuerte. Sólo quiero que me lleves de tu mano por la senda y atravesar el bosque, que divide nuestras vidas. Hay tantas cosas que me gustan hoy de ti, me enamora que me hables con tu boca, me enamora que me eleves hasta el cielo, me enamora que de mi sea tu alma soñadora. Esperanza de mis ojos. sin ti mi vida no tiene sentido, sin ti mi vida es como un remolino de cenizas que se van volando con el viento. Yo no sé si te merezco, sólo sé que aún deseo que le des luz a mi vida en los días venideros. Léeme muy bien los labios, te lo digo bien despacio»..
Por el resto de mis días, quiero ser tu compañía
El café estaba super quemado, apago el fuego como si nada, pero hay algo claro en todo esto, que el mejor desayuno de mi mañana, es cada una de esas palabras escritas en un papel.. Cada palabra resuena en mi alma, y esta estalla de felicidad, desborda de amor.. Aún con ese misterio de no saber quien es, me basta para empezar mi nuevo día de una manera algo particular..
Antes de comenzar con la lectura, se aconseja reproducir el siguiente audio (Para darle un poco mas de clima al texto)
Una luna llena, ilumina el ventanal. Parada apreciando esa fotografía exacta, junto a una copa de vino. La habitación tenia una luz ténue, un aroma especial habia en el ambiente. Se escucha el sonido de la puerta que se cierra. Sorpresivamente, se apareció. Sin dejar que reaccionara se acerca rápido, con un pañuelo de seda para vendar mis ojos. Me gira lentamente para abrazarme. Su perfume se impregno en mi cuerpo. Un suave beso en el cuello. Asi comienza un pequeño viaje de placer..
Mis ojos estaban vendados, dejo llevarme por aquellas caricias que recorren lentamente el cuerpo. Agarra mi copa para dejarla sobre la mesa, pero antes, toma mi mano derecha y sumerge en la copa un dedo para que se moje en aquel vino tinto, sin apuro lleva el dedo a su boca, saborea un poco y acerca su boca a la mia.
Aun sin palabras, siento que se aleja un instante, y es alli cuando una música suave suena en la habitación. Me agarra las manos, pega su cuerpo junto al mio para empezar a bailar al ritmo de la música. La sensación de tener los ojos vendados, deja que la mente se desconecte un poco de ese cuerpo y se dedique exclusivamente a las sensaciones que provoca ese clima. Besos, caricias y de a poco siento que el pañuelo comienza a desatarse.
Mis ojos se abren, estabamos ahí, cuerpo a cuerpo. Sus ojos parecian iluminados entre la oscuridad, su sonrisa una vez mas se apodera de mi. Mi boca no resiste más, cae rendida a la suya. El beso más esperado, aquel contacto tan deseado, estaba sucediendo en ese instante. Mis manos comienzan a recorrer su figura, su piel suave, lentamente comenzamos a caer sobre la cama. Una respiracion que iba en aumento cada vez que uno de los dos hacia algun movimiento.
Dió el primer paso, entre el atractivo jugueteo previo, desabrocha los botones de mi camisa, intenta sumergirse poco a poco, para calmar su sed, mientras que se activan en mi, cada uno de los sentidos. Es algo mutuo lo que sucede, opto por cambiar de roles ahora soy yo quien toma el control de la situación para poder avanzar en este viaje de placer. Ropa, que termina en el suelo, masaje en la espalda acompañado de pequeños besos. Se escucha su voz..-Ahora, es mi turno!
Una risita picara de mi parte y dejo que se desplome mi cuerpo para disfrutar de lo que vendría. Su mano suave, inconfudible, me transporta a otro lugar, aquel calor interno se hace sentir aun mas en ambos. Sus caricias parecen magicas, un pequeño cosquilleo me provoca cuando acaricia el pelo mientras deja su marca sobre mi cuello.
Sin dudas, esta es una conexión que va mas alla de los cuerpos, son nuestras almas las que se encienden, las que provocan todas estas sensaciones. Sin esperar mucho mas, nuestros cuerpos empiezan a fundirse, una y otra vez. El tiempo no existe, todo aquello que nos rodea comienza a desaparecer, el mismo lugar donde dos personas estan haciendo el amor, se transforma, solo son dos almas, fuera de su cuerpo, entrelazandose, iluminandose por completo. Llegando al climax de una forma especial, una forma inexplicable.
Aquel sentimiento que se transforma en una unidad sagrada. Aumenta más y más la intensidad del momento. Una respiración ya contenida explota en el aire, ya habia llegado el punto máximo de ese instante. Comienzan a caer lentamente sin desprenderse el uno del otro. Los ojos se abren de par en par y todo parece volver a la normalidad, cuerpos humedos, corazones acelerados. Frente a frente, se contemplan en silencio, un brillo especial se aparece en ambos. Sonrien dulcemente y juntan nuevamente sus cuerpos mientras sus ojos comienzan a cerrarse..
Una primavera donde todo comienza a florecer, todo renace nuevamente. En aquel edificio, ya con bastantes años encima. Lucen amplios balcones llenos de flores, hojas que se enredan entre si, coloridas, llenas de vida, pero hay una ventana en particular, aquella del 3º piso. Se ve cerrada, apagada, parece que en ese lugar, todavía no ha brotado la primavera. Un sentimiento se apodera de mi, siento que conozco aquel balcón, el edificio con su color maiz, una calle empedrada donde se circula en una sola dirección. Allí estoy, parada, mientras los pequeños comercios comienzan a levantar sus persianas para un nuevo día laboral. Siento una pequeña brisa que golpea mi cara de tal forma, que logra distraer mi vista a mi derecha, era un local de objetos, pero la vista se quedo fija en el cartel.. «Buono Ricordo, facile da trovare» (Buenos recuerdo, facil de encontrar). Con la boca entreabierta, eché una carcajada fuerte. Sin dudas, estoy en el lugar indicado, los pies no fallaron. Mire si venia alguien para poder cruzarme hasta la puerta del edificio. Ya en la cuadra, trato de ver si esta alguien dentro del edificio, pero no veo mucho movimiento, asi que camino unos pocos pasos hasta ese local, para ver que tal son los objetos en venta y de paso, lograr conseguir algo que me sirva, para continuar con mi viaje. La vidriera esta repleta de cosas lindas, adornos de todos los tamaños, coloridos, algunos antiguos casi ni se veian. Como no habia nadie adentro -salvo su dueña-, me decido y entro. La puerta al abrirse lanzo una breve melodia. Sonrío y me dirijo al mostrador. Mientras camino hasta aquella señora que atiende el lugar, observo sobre la mesa, una pequeña piedra con forma de corazón, que rodeaba el mismo, una especie de pulsera con una llave. -Se ve bastante atractivo, no sería extraño que lo termine comprando-. Ya delante de la señora, con aire de amable, trato de emitir mis primeras palabras.. -¡Buongiorno! (me tiembla un poco la voz, pero ya me voy a acostumbrar a eso).. -¡Buongiorno Signorina!, ¿Posso aiutarla? (Buenos días señorita, ¿Puedo ayudarla?) Quedo en silencio y miro de cerca el objeto, la señora enseguida capto como mi mirada se quedo perdida en el corazón de piedra rosado. Lanzó una sonrisa y siguió acomodando lo que habia sobre el mostrador. mientras yo, seguia observando de cerca…
Despúes de un tiempo, decido volver a escribir. Ese momento de desconexión es total, pareciera que la mente se queda nula, que entras en un estado de coma y cuando salis, no entendes ¿Qué paso?.. Y se te viene la ultima imagen que tuviste antes de que las pilas se terminen fundiendo. Igual, seguis sin saber ¿Qué paso?.
Se mantiene el mismo circulo, giramos en la misma dirección, aunque a destiempo.
-¿Lo podes sentir? -pregunta- y ella responde: ¡CLARO QUE LO SIENTO!.. Pero todavía no pierdo esa esperanza, esa llama encendida que ilumina mi alma, donde se siente que de a poco, vamos a ir sincronizando. Cada paso que doy, es uno menos hasta aquella cima, hasta aquel cielo celeste que sin esperar nada, trae todo.
Pero ¿Cuánto falta para ver que se aproxima aquella cima de la que hablamos?.. ella duda un momento y se concentra en responder aquello que siente interiormente. -Aun faltan cosas por hacer, por curar, por vivir. Una vez que esa etapa llegue a su fin, ahí en ese momento, todo comenzará a ser totalmente distinto, el tiempo dejará de existir, lo que empezará a surgir, sera el producto de esfuerzos que tienen una recompensa, llegar a ese maravilloso cielo azul y encontrarte. Radiante, luminoso, con los ojos llenos de sentimientos que explotarán cuando tu mirada, quede fija en la mia. Cuando el velo caiga sobre la tierra, todo florecera en un instante y alli estaremos, nuestras almas desnudas ante tanta belleza, nuestras almas que son un solo rayo de luz rosa. Dias, meses, años, siglos esperando sin entender ¿Por qué?.
Allí, saldaremos todas esas dudas, crearemos un hermoso halo de luz rosa y lo enviaremos al maravilloso universo, en forma de agradecimiento. El, queda asombrado por cada palabra que desprende de su boca, sabe percibir aquel sentimiento que tiene cada una de las cosas que ella dijo. Se sonrie y acerca su mano al pecho de ella, sostiene su llama un instante, pero antes de despedirse, le dice las últimas palábras del día..
– Sabrás el gran valor de esa maravillosa llama. En el momento que estes lista, para emprender este vuelo, el que te llevará de nuevo a casa!.
Un suspiro se sintió, no estaba mas delante de ella. Pero miro su pecho, aun ardía aquella luz de amor que encendió antes de irse..