hi88 hi88 789bet 777PUB Даркнет 1xbet 1xbet plinko Tigrinho Interwin

Categoría: roma

  • + Tanto.. [Parte XIV]


    Continúa hablándome
    -No me conoces y eso es algo que puedo tener a favor, porque me gustaría que me conozcas sin ningún rotulo, para la mayoría soy una persona pública y para vos simplemente soy un desconocido. No quiero que salgas corriendo, ni mucho menos pretendo asustarte. Necesitaba compartir este momento con vos, mirarte, apreciarte de cerca, descubrirte de a poco, saber quién es la persona que está delante de mí.

    Mis ojos se llenan de lágrimas, pareciera que cada una de sus palabras, estaban hechas para clavarse en cualquier parte de mi cuerpo y lograr un efecto mágico en mí. Sin pensarlo, lo agarro de la mano y le acaricio los nudillos, mi boca esta algo seca, pero el contacto con el me provoca una paz especial, mi corazón esta latiendo normal, mi escalofrío desaparece y algo fuerte golpea en el centro de mi pecho. Quiero hablar, pero no puedo emitir una sola palabra, y él pone uno de sus dedos en mis labios haciendo la seña de silencio, que no hace falta que hable. Su dedo recorre mi mejilla para limpiar una de mis lágrimas. Acaricia mi pelo y me abraza de una forma especial. Siento como llora desconsolado, intentando desahogarse de algo que solo él sabe y que sin explicación también siento yo. Entre ese sinfín de emociones solo me dice unas palabras entrecortadas

    -PERDON POR TODO, Y GRACIAS POR TANTO!
    El abrazo continuo, el calor se enciende de nuevo. El llanto ya calmo pero esa atracción de los cuerpos es tal que pasamos 5 minutos en silencio y abrazados. Cuando nos desprendemos para tomar un poco de aire, Gaspar vuelve a retomar su monologo
    -Seguro que tenes muchas preguntas para hacer, tiempo de sobra hay para que pueda responderte cada una de ellas. Lo que te haya dicho, tal vez lo entiendas como no. Te voy a dar todo el tiempo que necesites para cuando estés lista, estoy a tu disposición para lo que necesites. Prometo no invadirte más con sorpresas o anónimos. Solo necesitaba encontrar un momento para que charlemos y por fin se dio.-Sonríe y mueve la cabeza como pidiendo que diga algo. 
    Aturdida por todo trato de expresarme lo mejor que puedo
    -La verdad que no entiendo nada, estoy confundida. No entiendo como sabes tanto de mí. La fama que tengas en tu país no me interesa conocerla. Te agradezco por las atenciones que tuviste en estos días, incluyendo hoy. Pero creo que todo esto termina acá. 
    Me levanto del sillón y camino hasta la puerta, tengo una mezcla de sensaciones raras, siento que me está faltando el aire, pero trato de apurarme para salir de acá. El reacciona enseguida y trata de frenarme agarrándome del brazo, me volteo y al mirarlo no resisto. Lo abrazo sin motivo. Con los ojos cerrados y aferrada a su cuerpo, siento una corriente extraña. Visualizo inconscientemente, como una cinta de video que corre a la velocidad de la luz, diferentes épocas, situaciones de desesperación, momentos felices, un hombre y una mujer. Un paso del tiempo donde las dos personas siguen allí de pie, lagrimas, ángeles, luces que encandilan a ambas figuras, paisajes y uno en particular, un jardín lleno de flores, un banco dorado mirando a un puente donde abajo corre el agua lentamente, me veo. Estamos allí sentados los dos, estamos iluminados con una enorme esfera de luz dorada. El escenario cambia nuevamente, hay una mujer con un niño, un hombre joven con preocupación. Un aeropuerto y en ese momento, mi cuerpo comienza a temblar y la proyección termina. 

    Abro mis ojos, el cuerpo de el también tiembla, nos apartamos el comienza a calmar su temblor, pero yo no puedo controlarlo, sufro ese maldito ataque de llanto y me desplomo al piso. Siento que me falta el aire, parpadeo y no logro ver nada. Escucho la voz de Gaspar bastante distorcionada pidiendo ayuda. No siento a mi cuerpo, veo una luz brillando al final de un camino oscuro, no tengo fuerza para caminar hasta allí, esa luz se acerca a mi es la silueta de una persona que no conozco, y empieza a hablarme.

    Artista: Pablo Alboran
    Cancion: Tant


    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Una nueva oportunidad [Parte XVIII]



    [Nerviosa subo las escaleras y me encandilan las luces, trato de mantener mi mirada a la nada misma pero siempre mirando adelante y caminando con tranquilidad. Cuando llego hasta en animador, lo saludo con un beso y parece congelarse todo, cuando su mirada se queda clavada con la mía, él parece sorprendido y yo avergonzada de estar en este escenario

    No duda un instante y se viene al otro lado mio, animando mas el desfile, pide que de una vuelta y me sostiene de la mano. El calor de su mano esta quemando todo mi cuerpo, me aprieta con fuerza la mano, sin querer desprenderla. Cuando termino de dar la vuelta y deslizo lentamente mi mano acariciando sus dedos, me quedo inmóvil, al sentir algo en uno de ellos. Un anillo exactamente en la mano izquierda. Mi alma parece caerse al piso mientras que trato de dibujar mi mejor sonrisa y hacerme a un lado para que terminen de subir las que restan. El notó la incomodidad que me causo haber sentido su anillo y trata de seguirle el ritmo al animador pero parece preocupado. Regina y Mailen desfilaron realmente como dos modelos, y las han aplaudido mucho. La mirada del Sr. Misterio no deja de seguirme disimuladamente. Y yo acá parada, delante de mucha gente muriendo de vergüenza.
    El animador invita a Gaspar y dos personas más a deliberar las ganadoras. No tardan mucho y Gaspar toma el mando de dar a conocer las ganadoras. Comienzan a nombrar el tercer puesto que es para Fiorella con el nº 5, se gano una cena para cuatro personas en el boliche y consumiciones gratis. Todos aplauden. Continúan con el segundo puesto que es para el número 14 (Sofía) Otra cena pero para dos personas y una cartera de Gucci. Y el puesto nº 1 es para Penélope (nº 11). Mailen y Regina se abrazan y festejan, mientras yo intento bajar a tierra, me empujan un poco pero cuando me doy cuenta, tengo la mano extendida de Gaspar que me viene a buscarme para llevarme al centro del escenario y darme los regalos. Antes me da un abrazo, y ese calor florece más en todo el cuerpo. 
    Hay algo raro entre ambos, lo siento así y creo no equivocarme, mi cuerpo no quiere soltar el suyo. Pero él se aparta un instante para darme el Gift Card de 1000 Euros y señala la botella de Champagne que está en una mesa al costado. Una vez que me entrega la orden de compra, me vuelve a abrazar y entre el ruido, me dice unas palabras al oído
    -Necesito que hablemos, cuando todo termine, mi seguridad te va a guiar hasta donde estoy. Solo unos minutos, por favor
    -OK. –A secas sin dudar ni un segundo-
    -Gracias –me lanza una sonrisa compradora y se aparta de mí. 
    Él se despide del público y el animador también, mientras  Regina y Mailen vuelven para abrazarme y cuando nos apartamos del escenario, nos dan una orden que equivale a la botella gigante de Champagne. Caminamos juntas hasta la escalera por donde entramos para disfrutar de la noche, pero antes de seguir las interrumpo un segundo
    -Chicas, necesito hablar unos minutos con alguien –no termino de hablar cuando tengo a un seguridad al lado mio que interrumpe mi dialogo
    -Disculpe ¿Srta. Benedetti?
    -Si –lo miro extrañada-
    -Sus amigas pueden ir hasta el 2 piso que está habilitado para su festejo y allí también esta la persona que necesita hablar con usted. Pueden acompañarme por aquí –toma el mando para llevarnos al 2º piso. Regina y Mailen se quedan mirando algo extrañadas, no entienden nada pero la felicidad es tan grande que evitan preguntar.
    Subimos escaleras y ya estamos en el segundo piso, ellas caminan hasta una mesa donde hay copas y el hombre de seguridad dobla en un pasillo, donde hay una sola puerta. Golpea y la abre me hace seña de que pase. 
    A penas ingreso, siento un clima especial, un lugar apartado de todo, luces tenues y la música del boliche que apenas se escucha. Al fondo de la habitación está parado, junto a dos copas y un sillón blanco. Camino hacia él y me quedo mirándolo. Se ve tan sencillo y no deja de ser hermoso, sus ojos brillosos, su pantalón negro y camisa blanca, como cuando nos cruzamos en el ascensor. Él también me mira. Me extiende su mano para darme una de las copas y con la otra mano me agarra para llevarme hasta el sillón y nos sentamos. Alza su copa para brindar
    -Por esta maravillosa noche, llena de hermosos momentos –sonríe y hace sonar su copa con la mía. 
    Tomamos un sorbo y la dejamos a un costado. Nos quedamos un minuto en silencio, contemplando ese instante, mueve su cabeza a un lado y sonríe más. Toma fuerza para hablar
    -Sé que todo esto parece una locura, pero si hay algo que puedo asegurarte, que nada de lo que sucedió hasta ahora es casualidad. Perdón si mi español no es tan bueno, lo intento día a día por una única razón. 
    Se le ponen los ojos brillosos, como a punto de explotar en un llanto, yo siento el escalofrío ya típico en mí y como mi corazón bombea de una manera extraña. Continúa hablándome..
    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Entre luces y humo.. [Parte XVII]


    [Continúo con un fragmento que forma parte de la historia que estoy escribiendo]



    En nuestras muñecas, tenemos la cinta que nos distinguen un poco, al menos seguridad sabe que podemos entrar y salir de este vip cuantas veces queramos. Con las chicas decidimos bajar para ir a la pista principal, Regina esta tratando de ubicar la barra para ir a pedir unos tragos

    -Chicas, espérenme por acá, voy en busca del primer trago de la noche, no se van a arrepentir –se ríe pícaramente-

    -Te esperamos acá, apresúrate antes de que se llene de gente –Mailen le dice entre gritos porque la música ya esta demasiado alta-

    Mientras Regina se va, nosotras nos ponemos a bailar moderadamente, visualizo a lo lejos que dos chicos se están acercando con aires de querer seducir a alguna de las dos, mi sexto sentido no falla y uno de los chicos disimuladamente se acerca a Mailen pero esta lo esquiva sutilmente y continua bailando conmigo, para apartarlos me agarra de la cintura simulando algo que no somos, pero les deja claro a los chicos que no nos interesa su presencia. Se van frustrados entre el humo y las luces de colores y nos echamos a reír fuerte

    -Estos hombres suelen ponerse densos, por eso, lo mejor es hacer que somos homosexuales y se apartan enseguida, salvo que sean muy insistentes y se liguen una cachetada de mi parte

    Nos reímos demasiado y se suma Regina con dos tragos.

    -Este lo compartimos nosotras y este es para vos –me da mi trago que tiene buena pinta, muy colorido

    -¿Qué es? Pregunto ansiosa pero ya estoy dando mi primer sorbo
    -Sorpresa, prueba y después te digo de que se trata –sonríe y le da un sorbo al suyo

    -Mmm tiene una mezcla rara, pero es buenísimo.

    -Es el trago del boliche, uno de los mejores.


    Mientras seguimos bailando y tomando el trago, estamos casi en la mitad de la pista, en el escenario empieza a haber un movimiento, parece que esta por dar la bienvenida a esta noche. La gente se va amontonando cerca del escenario, la música disminuye y sale desde un costado un muchacho joven, con micrófono en mano

    -Bienvenidos a la noche de Nice Club. Hoy como saben, tenemos el desfile de chicas con el premio principal de una botella de Champaign y un Gift Card de 500 Euros para comprar ropa. Pero este desfile va a ser especial, porque tenemos un invitado de lujo. Las chicas se ponen a gritar y aplauden

    -¿Quieren saber quien es? –Pregunta efusivo el animador-

    Se escucha un coro gritando ¡SI!. Regina me dice al oído

    -Es algún famoso actor de acá, conozco a pocos, todavía no me acostumbro a la televisión italiana –se ríe

    -Yo menos, para mi es todo nuevo- volvemos a mirar al escenario y poner atención a lo que aparecerá en segundos. El animador se prepara y presenta

    -Esta noche nos acompaña el actor Gaspar  Costantini un fuerte aplauso

    Antes de que aparezca en el escenario, mi cuerpo siente un escalofrío como los que suelo tener últimamente sin explicación. Las luces del lugar iluminan al centro del escenario donde se aparece el actor, cuando ya esta frente a la multitud de gente del boliche, mis ojos se abren al máximo, parpadeo varias veces porque no puedo creer lo que estoy viendo. El señor misterio, el que me dejo las flores, el que hoy a la mañana me dio una tarjeta donde decía que necesitaba hablar conmigo. EL esta aquí y ahora, en un evento donde yo no tenia ni el mínimo interés de encontrarlo. No puede estar pasando esto. Regina nota que algo me esta pasando y me sacude

    -¿Estas bien? Joder que te derretiste por ese guapo –con un tono burlón-

    -Pero no seas tonta, estoy bien. Creo que necesito otro trago voy a ir por uno –entrecortada y sin aliento me doy media vuelta para ir rumbo a la barra a pedirme algo para tomar y digerir este momento extraño.

    La barra esta prácticamente vacía, toda la atención esta puesta en el escenario, en él.

    -Me darías tres tequilas por favor

    -En seguida –Con toda la onda el barman prepara mis tres tequilas-

    Observo desde el costado al escenario, se lo ve tan suelto, sencillo, sonriente como el primer momento que vi su sonrisa en aquel bar. Ahora entiendo a que se debía tanto alboroto aquel día. Pero no entiendo que es lo que quiere de mí. El barman me distrae entregándome los tres tequilas y yo le doy la plata. Estoy nerviosa, no sé que hago acá. Miro los tres vasos de tequila me hecho sal en la mano, agarro el primer vaso cuento hasta tres y me lo bajo de golpe, hago lo mismo con los otros dos y después me devoro el limón para que no sea tan fuerte lo que acabo de hacer. Intento prestar atención a lo que esta diciendo el animador, cuando Regina y Mailen se vienen hasta mi y ven que me tome tres tequilas de golpe.

    -Tenemos que anotarnos Veni con nosotras Penélope –efusiva me agarra Regina de la mano

    -¿Anotarnos? ¿De que hablan? –desconcertada me llevan hasta una punta donde hay alguien con una planilla y ya comienzan a juntarse varias chicas. 

    Somos unas de las 15 que anotaron, nos piden que aguardemos a un costado que ya nos viene a buscar. Entre el alcohol que tengo encima y la música parezco estar en otro planeta. Tomo conciencia un instante y vuelvo a preguntarles a las chicas

    -¿Pero, de que concurso me hablan?

    -El del desfile, estamos anotadas para subir al escenario y ganarnos el premio mayor –se ríe fuerte y muestra su alegría de oreja a oreja Mailen

    -Están locas ¿Subir al escenario ahora? No puedo mantenerme en pie –me hago la graciosa intentando hacer el 4 pero me sale bastante bien y ellas se ríen de mi actitud desesperada

    -Venimos a divertirnos, esto forma parte de diversión. Vamos guapa, no te eches atras ahora –Regina es la que lleva el mando de la salida y tiene razón, estamos para divertirnos.


    El chico de la planilla nos llama a las quince chicas y nos lleva por una puerta interna que termina desembocando cerca de la escalera del escenario. Nos entrega un número a cada una. Me toco el 11, Regina tiene el 12 y Mailen el 13. A todo eso, hecho un vistazo a todo el entorno, veo que hay dos hombres parados, tienen la fachada de ser custodias mientras lo observo uno de ellos me ve y deja su mirada fija en mi, como sorprendido de que este allí, se da vuelta y se pone a hablar por un micrófono que tiene, yo trato de no distraerme tanto. Por suerte el Sr.Misterio no se ve por acá, me da alivio. Regina se acomoda un poco la ropa y trata de disimular sus nervios. Mailen esta mas tranquila y la ayuda a prenderse el numero en la ropa. Mi mirada esta en plena búsqueda, pero no tengo resultados. Se escucha la voz del animador, que empieza a llamar de a una. Con las chicas inventamos un breve gesto de buena suerte. Va bastante rápido todo, cuando me distraigo Regina me pega un grito

    -ES TU TURNO PENELOPE! ARRIBA QUE ALGUNA DE LAS TRES TIENE QUE GANAR –Saltando de felicidad-

    Y el chico que nos había anotado, me hace señas para que me acerque a la escalerita. El animador me presenta efusivamente

    -La participante nº 11, Penélope Benedetti aplausos

    Nerviosa subo las escaleras y me encandilan las luces, trato de mantener mi mirada a la nada misma pero siempre mirando adelante y caminando con tranquilidad. Cuando llego hasta en animador, lo saludo con un beso y parece congelarse todo, cuando su mirada se queda clavada con la mía, él parece sorprendido y yo avergonzada de estar en este escenario..  

     
    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Noche de festejo [Parte XVI]

    La tarjeta esta arriba de la mesa, iluminada por la misma lámpara del ambiente. Dudo en llamar por teléfono, tampoco se si será buena idea escribir un correo. Falta poco para las 21.00 y no quiero arruinar la salida con las chicas, termino de pasarme un poco de base mientras camino hasta la habitación para verme que tal estoy. Llevo puesta una falda floreada con fondo negro, que me llega casi hasta el muslo, unas sandalias de taco alto en color marrón, una camiseta negra clásica con un cuello redondo bastante profundo y para estar a temperatura normal, llevo mi blazer negro. Me estoy olvidando de ponerme mi colgante y sin aros, siempre tengo mala suerte con los aros y termino perdiendo alguno. Me miro de nuevo al espejo, puedo verme de pies a cabeza doy una vuelta y chequeo que todo este bien. Realmente esta imagen merece una foto, agarro el celular que esta sobre la cama y mientras carga la aplicación para la foto empiezo a poner caras graciosas. Ya estoy para disparar la primera foto, se escucha el clic cuando termina de sacar la foto. Realmente salió muy buena, me saco dos mas para tenerlas guardadas. Todavía me falta guardar algunas cosas en la cartera. Me apresuro un poco, guardo el celular un mini set de maquillaje, billetera y creo estar lista para esperar a Regina y Mailen. Apago las luces de la habitación, le hecho un vistazo a todo para controlar que no deje nada prendido o perdiendo. Camino hasta la puerta para ir rumbo al ascensor. Cierro todo con llave, mis pasos suenan fuerte en el edificio. Aprieto el botón para llamar al ascensor que esta en el 8 piso. Tarda en bajar. Cuando llega al 4º abro la puerta y para mi sorpresa ¡subieron las chicas!
    -EY! Coincidencia! Que guapa estas Penélope
    -Gracias Regina, ustedes también se ven muy lindas –Las abrazo y las saludo con un beso a ambas
    -Bueno, no las presente, ella es Mailen mi compañera de piso –Señala a Mailen que me vuelve a abrazar
    -Un gusto Mailen!. Espero que el lugar que hayas elegido sea bueno eh! –desafiándola de una forma graciosa
    -Pues claro que lo es, no te arrepentirás de haber ido. Vamos a tomarnos un taxi que está en la puerta esperándonos, así llegamos más rápido y no se nos rompe nada en el camino –nos reímos juntas
    Ya estamos en PB caminamos hasta la puerta de calle, no tardamos mucho en subirlos, el chofer está escuchando una radio, baja un poco el volumen y Mailen le dice al chofer
    – Por favor, hasta Costantino Nigra 33, Nice Club.
    -OK –observa por el retrovisor la cara de las tres y pone toda su atención en llevarnos por el camino más directo.
    -¿Estas lista para divertirte esta noche? Además del cóctel, después el lugar se llena de gente por el boliche, así que vamos a estar un largo rato bailando y tomando buenos tragos –me trasmite su emoción Regina
    -Claro que si. Estoy dispuesta a todo esta noche!
    Entre risas y algunas fotos que nos sacamos dentro del taxi, el chofer indica que ya hemos llegado, Regina es la que paga el taxi y antes de que quiera entregarle la plata me dice
    -La vuelta, la pagas tú. –riéndose-
    -Ok, la vuelta será mía entonces –les guiño el ojo mientras abrimos ambas puertas para bajar.

    El lugar esta colmado de gente, por suerte Mailén había hecho la reserva. Tiene una muy buena decoración. La recepcionista del lugar nos acompaña a nuestra mesa ubicada en el segundo piso, hay música de fondo y la mayoría de las mesas están ocupadas. Nuestro lugar tiene una vista amplia, yo me ubico frente a Regina y Mailen.

    -La verdad que una excelente elección para esta noche –digo contenta
    -Me alegro que te guste, es uno de los que más nos gusto desde que estamos acá.
    Se acerca el mozo para tomarnos el pedido.
    -Buenas noches señoritas ¿Qué van a tomar?  
    -¿Les parece una cerveza para cada una para empezar? –pregunta Regina
    En coro respondemos con Mailen
    -Si!!
    Mientras el mozo se retira con el pedido de la bebida, nosotras nos ponemos a charlar para conocernos más.
    -A ver, empiezo yo a preguntar. ¿Qué tal las trata Italia? –Pregunto
    -Por suerte, tenemos un trabajo estable y podemos vivir tranquilas. Últimamente esta muy complicado todo el continente europeo, pero nosotras no podemos quejarnos. 
    –Regina le guiña el ojo a Mailen
    -¿Y tú guapa que nos cuentas? –Mailen se apresura a preguntar
    -Llegar a Italia para mí fue todo un desafío. En una semana tuve que preparar valijas, despedirme de mis amistades y cuando me acorde, ya estaba volando en el avión. Realmente no había venido nunca a Italia, pero me di cuenta desde el primer día que pise tierra que tuve esa sensación de conocer este lugar desde siempre. Por suerte mi trabajo es algo que me apasiona, muy poca gente se dedica a lo que realmente le gusta. Y siento que es un privilegio este lugar que tuve y en una empresa mundialmente conocida. –me florece una melancolía extraña cuando hablo, pero contengo mis lagrimas
    El mozo interrumpe con las cervezas, nos sirve un poco a cada una y deja un popurrí de snacks para acompañar. Cuando se retira, Mailen alza su copa
    -Pues, entonces brindemos por esta nueva amistad, nueva vida y por la felicidad plena
    La seguimos con Regina. Damos un buen sorbo y nos echamos a reír
    -Este lugar es muy conocido aquí en Italia. Hay presentaciones, concursos con premios, además de la música, creo que nos vamos a divertir mucho –Ya está alegre Mailen, eso que solo tomo a penas un poco de cerveza-

     -Video institucional del boliche Nice Club – 
    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Encuentro inesperado [Parte XIV]

    [Theo se para, mientras yo agarro mis cosas para seguirlo hasta la puerta, justo cuando la abre esta parada una muchacha de pelo castaño oscuro, vestida con una blusa y pollera de tubo con unos lindos zapatos acompañando toda la combinación del color beige y negro. Se sonríe ante la inesperada aparición del Señor Rizzi]
    Disculpe Señor. Venía a recordarle que en una hora, tiene la reunión con el sector de Recursos Humanos –se sonroja mientras inclina su cabeza a un lado esperando la respuesta
    -Miranda casi me lo olvido, por favor, prepara todo que en veinte minutos estoy de regreso. Voy a mostrarle a la Señorita Benedetti su lugar de trabajo
    Ella afirma con la cabeza y me muestra una sonrisa falsa, se da media vuelta y se va dejándonos el paso libre para comenzar con el recorrido por el piso que parece un inmenso lugar. Empezamos a caminar por un pasillo, en el mismo hay varias puertas de colores. La mayoria de las areas, estan dividas en dos. La primer área que vemos tiene el cartel colgado en la puerta que dice DISEÑO GRAFICO con un color rojo furioso, cuando entramos veo aproximadamente seis box de trabajo y todo el ambiente bien equipado, mas al fondo hay una puerta que corresponde al sector de quien lleva acabo esa área. Seguimos caminando, a una distancia infima, esta la nueva puerta con un color maiz con el cartel colgado que indica PUBLICIDAD.
    -Ves esa puerta –señala la que está al fondo de esa area y camina para abrirla, enciende las luces, el ambiente es calido, la decoracion de las paredes es blanca con pequeños detalles de vinilo en color violeta. Un gran ventanal con vista a la ciudad, delante de eso hay un gran escritorio con un ordenador, telefono y muchas cosas de libreria nueva, hay un sector que tiene un sillon de dos cuerpos junto a una mesita pequeña con algunas revistas, un modular con muchos compartimientos. Realmente es maravilloso este lugar. Theo interrumpe mi asombro
    -Este será tu lugar de trabajo -Sonríe
    Me quedo maravillada por mi futuro lugar de trabajo. Mi sonrisa se dibuja en mi cara y creo que Theo se da cuenta
    -¿Te parece agradable? Cualquier cambio o lo que necesites, no dudes en decirlo. Queremos que te sientas cómoda, como lo están todos acá. –sus palabras me da confianza y alivio-
    -Me agrada, es mucho más de lo que esperaba. Realmente alucinante
    Después de aprobarlo, apaga las luces y cierra la puerta, me doy cuenta que ya está colgado el cartel de “Gerencia de Publicidad”. Parpadeo emocionada y no me doy cuenta que Theo continua caminando, trato de alcanzarlo de a saltos, me muestra la última área que es la de REDACCION, está en un bloque a la vista de todos, varios box con computadoras y todo lo que pueda tener un área de ese tipo. A la derecha hay un nuevo pasillo que contiene muchas publicidades como parte del decorado, tapas de todo tipo. Nos cruzamos con una puerta mas que es la sala de descanso, muy amplia mesas por todos lados junto a maquinas con golosinas, gaseosas, café. Atravesamos todo ese espacio y sin darme cuenta al pasar por otra nueva puerta, ya estamos de nuevo en la recepción. Me mira pensativo
    -Nos falta recorrer el piso 23, están las oficinas de los directivos, recursos humanos, la sala de reuniones y de capacitación. Pero estoy seguro que en la semana vas a poder darle un vistazo.
    -No hay problema!, ya quede fascinada con este piso, no me imagino el que sigue –me rio inocentemente
    -Me olvidaba de algo –lanza su mirada furiosa a la recepcionista y esta levanta su mirada para prestar atención a sus palabras- Giorgia, te va a entregar un sobre con unos papeles, reglas básicas de la empresa, el tema de vestimenta, horarios, tu tarjeta de acceso y también mi tarjeta, para que podamos coordinar cuando comiences con tus clases de italiano.
    -Bárbaro, seguramente a mitad de semana te llamo para arreglar todo. Igualmente, nos vamos a cruzar acá –me sonrojo-
    -Claro, yo trabajo también acá así que no hay problema por eso. Es un placer haberte entrevistado y te trasmito las disculpas de mi madre, que no pudo venir, pero no va a faltar oportunidad para que tengan una reunión. –Sonríe con aire de ganador y me deja más aliviada saber que Theo es el hijo de ella-
    Me extiende la mano, y me da un beso en los nudillos provocandome mas nervios
    -El placer es mío –y me doy inmediatamente vuelta mirando a la recepcionista como si fuera un salvavidas ante tanta amabilidad.
    Giorgia se ríe y me mira, deja en el mostrador el sobre grande que tiene mi apellido, junto a la tarjeta de Theo. Le sonrío y camino hasta el ascensor. 

    Aprieto el botón de llamada y en segundos abre sus puertas, nuevamente vacío, cuando estoy apretando PB, el ascensor sube hasta el piso nº 26, largo un suspiro de queja, quería viajar de nuevo sola. Las puertas se abren, hay un hombre de espalda alto, despidiendo a una mujer, ella se ve bastante sencilla, apenas sonrie, con cabello ondulado hasta los hombros. Se termina alejando y el hombre se gira para entrar.

    Antes de que suba, mi cuerpo comienza a tener una reacción extraña. Un temblor, latidos que van en aumento y el extraño escalofrío en todo el cuerpo se vuelve a apoderar de mí. Mi cuerpo esta incontrolable, mi mente queda en blanco al ver que aquella persona que se voltea para entrar al ascensor ya estando los dos solos y con las puertas cerradas, levanta su mirada, que se clava en la mía, parpadeo rápido sin saber qué hacer, nerviosa extiendo mi mano hasta el tablero y marco PB apurada. Él se queda paralizado delante mío, mirándome fijamente. No puedo explicarme que hace acá adentro, conmigo. Es el mismo hombre que apareció en la cafetería, acompañado de un grupo de chicas efusivas, el que casi hace que me ahogue en mi propia bañera. Esta frente mío, inmutado y encima no es capaz de decir nada. Intento apartar mi mirada, pero no puedo, recorro disimuladamente todo su cuerpo, empezando por los zapatos negros, traje negro con camisa blanca y los dos primeros botones desabrochados. Llego a su cara, parece saborear este instante con su sonrisa, sus ojos, esos color cielo están brillando en este instante como si nada, hoy parecen más claros que otras veces. El ascensor parece hacer su recorrido con lentitud, se me hace eterno este momento, algo interrumpe mi pensamiento. Es el sonido del celular, lo saca rápido del bolsillo y mira quien es, inclina la cabeza y no atiende -o tal vez debera ser un mensaje de texto-, vuelve a guardarlo. En ese momento extiende su mano y aprieta el botón de SS. Entre mí, pienso que soy una torpe, no fui capaz de preguntar si el también bajaba en PB o iba a otro piso. De repente, nuestras miradas se encuentran más fuertes
    -Scusate me ne dimentico di dire il parcheggio (Me disculpa, me olvide de decirle que voy al estacionamiento)    
    Siento como si me hubiera leído el pensamiento y trato de responderle con la naturalidad que me caracteriza tan pocas veces
    -Non ti preoccupare –nerviosa bajo mi mirada- 
     
     
    Por fin el ascensor llego a PB, cuando se comienzan a abrir las puertas, él se corre a un lado y deja que pase. Mis pasos van en cámara lenta cuando escucho su voz
    -Buongiorno signorina –y vuelve a sonreírme más emocionado que al principio-
    -Buongiorno signore 

    Siento que su mirada me hace un escaneo intensivo, mientras me apresuro para llegar a el molinete, intentando encontrar en la campera mi tarjeta de visita, ya en mano la dejo caer y paso. Cuando me doy vuelta disimuladamente, veo que el ascensor ya tenia cerrada sus puertas y largo un gran suspiro que contiene una mezcla de excitación, alegría, amor y vergüenza..

    Artista: Andres Cepeda
    Cancion: No es casual

    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Presentacion formal [Parte XIII]

    Llego por fin hasta el edificio enorme y moderno, subo las breves escaleras tiene dos entradas, opto por la puerta giratoria. Ya dentro del lugar, me quedo impactada por la arquitectura del lugar, veo a una distancia importante, un alargado mostrador, con dos mujeres de chaqueta negra y camisa blanca, a un costado uno de los agentes de seguridad. Camino con una mezcla de nervios hasta la chica que parece estar desocupada, lanzo mi mejor sonrisa y tomo fuerza para poder hablar italiano, como si fuera una nativa de la lengua.

    -Buongiorno ¿Parla Spagnolo? –mis ojos intenta distraerse, pero mi sonrisa nerviosa permanece intacta
    -Buongiorno Signorina. Hablo español ¿En que puedo ayudarla? –Suspira con aire a fastidio
    -Tengo una entrevista a las 10.00 con la Señora Grand
    -Déjeme ver, un minuto –se sumerge en la pantalla LED de su ordenador, mientras con otra mano marca en el conmutador el numero de interno –calculo que será del piso donde se encuentran las oficinas de G&R Group S.A-

    Me doy cuenta que tiene un audífono en el oído que pasa desapercibido para cualquiera, y el micrófono esta prendido a la chaqueta, mientras habla en italiano, me detengo a apreciar una gran pared de cristal que esta de fondo a las recepcionistas. Me vuelve a traer al Aquí y Ahora la recepcionista con su voz algo aguda

    -Disculpe, acá me confirmaron la entrevista, pero la persona que la espera es el Sr. Rizzi. Necesito que me brinde su número de DNI y nombre completo para poder darle el acceso como visitante.
    – Penélope Benedetti – DNI: 33.514.222

    Carga los datos y pasa la tarjeta magnética por un lector, cuando obtiene la luz verde, la deja sobre el mostrador para que la agarre.

    -Pase por aquellos molinetes, pero vaya al que es exclusivamente para visitantes y suba por el ascensor al piso nº 22. Allí la estarán esperando –lanza una media sonrisa y se concentra en atender un llamado.

    Camino con toda mi elegancia, tengo suerte que no es un horario donde se movilice mucha gente, paso mi tarjeta en el lector, molinete gira. Justo hay un ascensor abierto, esperándome a que suba, entro y busco en el panel el numero 22. Lo apretó y las puertas comienzan a cerrarse. Largo un suspiro e intento acomodarme un poco el pelo y mi chaqueta de jean. Subir estos pisos en soledad y a toda velocidad es como si hubiera despegado con una nave a la luna. El ascensor emite una voz seductora informando “Usted, esta en el piso 22” –pero en italiano- y de golpe se abren las puertas. Respiro hondo y profundo, parpadeo y pongo primero el pie derecho, dentro de la famosa empresa de la que todos hablan y tengo la suerte de ser parte de este lugar. Un cartel gigante con el logotipo de G&R Group y una puerta automática que se abre cuando me pongo delante de ella. Otro mostrador esta a la vista, pero esta vez un poco mas pequeño que la recepción del edificio. Camino con alegría hasta la chica que esta allí mirándome con cara de pocos amigos.

    -Buongiorno ¿Arriva per l´intervista?
    -Buongiorno. Si –mis nervios intenta jugarme una mala pasada
    -Un momento per favore –baja la mirada y levanta el teléfono-

    Mientras habla y sin darle mucha importancia a su dialogo en italiano, trato de tomar un poco de aire dándole la espalda a la chica. A los dos minutos de anunciarme, siento que alguien se pone detrás mio y una voz un poco áspera me dice:

    -¿Señorita Benedetti? –con ojos brillosos, color gris se me queda mirando cuando me doy vuelta, parece algo sorprendido 

    -Si, ¿usted debe ser..? –no me deja terminar la frase y me corta respondiendo 
    -Si, el Sr.Theo Rizzi. Un placer -extiende su mano para saludarme- Acompáñame por acá.

    Toma el mando de este breve camino rumbo a su oficina. Abre la puerta y se corre a un lado para que pase primero. Se ve bastante agradable, mucha iluminación unos sillones de cuero blanco, varios cuadros colgados, un escritorio amplio y bastante desprolijo. El cierra la puerta y mientras me quedo observando todo mí alrededor, él se va a ubicar a su trono. Me distrae con su voz

    -Tome asiento Srta. Benedetti

    Me saco mi chaqueta y la dejo con mi cartera sobre el otro sillón vacío y tomo asiento tratando de relajarme. Theo, se pone a buscar unos papeles que están sobre el escritorio, creo que mi curriculum o alguna indicación de parte de la Sra. Grand. Mientras trato de entender quién será este hombre, no me lo imagino casado con la señora Grand, es demasiado joven para ella, pero uno nunca deja de sorprenderse. Encontró el papel ¡Por fin!, le da un vistazo y lo deja a un costado. Levanta su mirada que se encuentra con la mía una sensación de incomodidad parece envolvernos, pero va disminuyendo cuando empezamos la charla

    -Antes que nada ¿Puedo tutearte? –Sonríe y yo afirmo con la cabeza-

    -Bárbaro, como sabes, nuestra empresa tiene su sede en Argentina, que es donde estabas trabajando hasta hace dos semanas. Nuestra sede central, decidió trasladar a un empleado de allá para que pueda formarse y trabajar acá, y mejorr las condiciones laborales. Tu puesto será diferente al que tenías en Buenos Aires. Ocuparas el cargo de Gerenta de Publicidad, tendrás más responsabilidades lo que significa que tendrás que esforzarte y dar buenos resultados. A simple vista, sabiendo como viene tu curriculum, tenes todas las cualidades para tomar el mando de ese puesto. Igualmente, me gustaría hacerte algunas preguntas que son más que nada para conocerte un poco más y guiarte para que te desenvuelvas sin problema en tu puesto. –sonríe y mira de reojo la hoja

    -¿Qué tal andas con el Italiano?
    -Estoy tratando de hacer todo lo posible para desenvolverme con naturalidad, admito que me cuesta un poco hablar, pero por suerte, tengo buen entendimiento. –no hago otra cosa que mantener mi sonrisa para pasar desapercibida por mis nervios
    -¿Buscaste la forma de perfeccionar eso?
    -Estoy buscando, quería primero instalarme por completo en el trabajo, para después organizarme en cuanto a horarios.
    -Que bueno. No se si te habrán comentado en Buenos Aires, pero nosotros tenemos un espacio exclusivo para capacitar a nuestros empleados en diferentes áreas, una de esas es idioma. Hay clases de italiano, para personas que como vos, que vienen del exterior y se instalan en la empresa con una base. Yo estoy a cargo de unas cuantas clases. Si querés cuando termines de ubicarte y estés lista, podemos organizar los horarios para las clases, si preferís comodidad, podemos practicar en tu casa o como hacen algunos, en la sala de capacitación que esta en el piso de arriba. La empresa se hace cargo de esto, no hay que pagar nada extra. Cuando gustes, me avisas y empezamos.
    -Que bueno, no estaba al tanto de eso. Cuanto más rápido empiece, va a ser mejor.
    -Ok, cuando estés dispuesta a empezar, nos contactamos y arrancamos. Vas a salir hablando italiano muy pronto y te va a dar una gran satisfacción. Volviendo al cuestionario informal, ¿Te gusta estar rodeada de gente o preferís estar en solitario?
    -Creo que ambas tienen lo suyo, me adapto sin problema pero si tuviera que elegir por una, prefiero trabajar en conjunto
    -Muy bien, creo que las preguntas fueron suficientes. Solo me queda recordarte que el lunes, arrancas a trabajar en este edificio. Te voy a pedir solamente unos diez minutos más, para invitarte a recorrer las instalaciones
    -Si, no hay problema. –Sonrío a tal punto, que parece que me hubiera ganado la lotería-

    Theo se para, mientras yo agarro mis cosas para seguirlo hasta la puerta, justo cuando la abre esta parada una muchacha de pelo castaño oscuro, vestida con una blusa y pollera de tubo con unos lindos zapatos acompañando toda la combinación del color beige y negro. Se sonríe y a la vez se sonroja ante la inesperada aparición del Señor Rizzi..

    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema
  • + Todo a su debido tiempo [Parte IX]

    Nuestras miradas chocan de una manera muy intensa, logro ver que sus ojos son color celestes, lo denomino mas color cielo. Aunque son de esos ojos que depende el tiempo, cambian a un color más oscuro o más claro. Es una mirada muy profunda, con una mezcla de preocupación. En ese instante que ambos sostenemos la mirada, pareciera como que todo nuestro alrededor empieza a disolverse y estamos solo EL Y YO. A una distancia infima, pero que no nos impide acercarnos. Logro ver por completo a aquel hombre que entro al bar entre muchos ruidos. Es alto, delgado, de cabello oscuro -con algunas canas-. Su vestimenta es muy clásica, unos jeans con una camisa blanca y zapatos negros. Su sonrisa es bastante particular pero la profundidad de su mirada, es lo que en este momento me hace perderme. 

    Caigo un instante a tierra, mi mirada estaba clavada en un punto fijo que era la nada misma, aquellas chicas que habia visto revolucionadas ya no estaban, y mucho menos aquel hombre de mirada profunda. Habian desaparecido todos por arte de magia. De golpe, se acercó el mozo con mi pedido. Ubica el capucchino y mi porcion de tiramisú a un costado, junto a un vaso de agua. Le sonrio y el se retira algo tenso.
    Miro mi cuaderno y esta vacio, en ese lapso de «shock» no habia escrito nada, asi que mientras pruebo el tiramisú y el café, no se me ocurre mejor cosa que plasmar el reciente acontecimiento. Que me deja pensando si realmente sucedio, o fue producto de mi imaginacion.

    La verdad, que si fuera la dueña del lugar donde compro tiramisú a veces en buenos aires, no tendria que enviarle mucho a este bar. Estaba muy rico pero me quedo con el de mi ciudad. Termino de apuntar todo lo que paso, y miro mi reloj, ya estaba cayendo la tarde y tenia que volver a casa. Asi que levanto la vista y le hago señas al mozo que me traiga la cuenta. El mozo a lo lejos asiste con su cabeza mientras yo busco la billetera en el bolso.

    Cuando llega el mozo a mi mesa, lo noto algo nervioso
    -Signorina il consumo è già pagata (Señorita, su consumicion esta abonada)
    Lo miro boquiabierta y le respondo con un italo-español extraño
    -Ma si, non pague niente (Pero, si yo no pague nada)
    El mozo interpreta mis palabras y se acerca un poco más para decirme algo, en un tono mas calmo y algo secreto
    Lo so, qualcuno ha pagato per voi e.. (Lo se, alguien pago por usted y..) 

    Saca la mano izquierda de atrás suyo, cuál mago encontrando el conejo en la galera. Y tiene un ramo de jazmines, con un sobre entre ellas. Sigo anonadada por la situación, sin poder decir una sola palabra. El mozo estira un poco más su brazo, dandome a entender que agarre el ramo. Lo agarro preocupada, el mozo se sonrie y esta por escaparse ante este acto romantico, pero no le pierdo el paso y enseguida reacciono

    Aspetta, mi puoi dire che l’ha lasciata?. Immagino che la persona che ha pagato tutto (Espere, ¿Me podria decir quien dejo esto?. Calculo que la misma persona que pagó todo)
    Mi dispiace, non posso dirti nulla, solo che tutti i pagamenti. Puoi tornare in qualsiasi momento, le porte sono sempre aperte (Disculpe, no puedo informarle nada, solamente que su merienda esta paga. Puede volver cuando quiera, las puertas estan siempre abiertas) -con un tono algo ironico, no me esta echando, pero me cerro la boca de alguna forma-

    Me sonrie y se va. Yo me quedo mirando el ramo de jazmines y aquel sobrecito cerrado, no puedo abandonar este lugar, sin antes, leer lo que hay en la tarjeta. Asi que con tranquilidad, desprendo el sobre y lo abro, saco la tarjetita para leer. –Por lo visto, esta escrita de puño y letra..

    «Espero que no se haya molestado por haberla invitado esta merienda, sin previo aviso y más sin poder compartila juntos. Para compensar este momento tenso, sus flores preferidas»

    Doy vuelta la tarjeta y una ultima frase..
    «Todo a su debido tiempo» T.M

    Mis alma comienza a sentir una nostalgia mezclada con alegria y lo peor de todo es que no comprendo por qué de tal efecto. Guardo la nota en el sobre y la dejo dentro de mi cuaderno que va directo al bolso junto a la billetera -previo de a ver separado la propina para el mozo, aunque no se la merece mucho- Antes de pararme, siento un nuevo escalofrio en todo el cuerpo, me quedo algo hipnotizada, agarro mi bolso, los jazmines y camino directo a la salida, pero antes paso cerca de la barra donde estaba parado el mozo, lo intercepto para preguntarle una ultima cosa..

    Mi dispiace, che era l’uomo che è entrato nei locali qualche tempo fa e rivoluzionato più persone? (Perdón, ¿Quién era el hombre que entro hace un rato al local y revolucionó a varias personas?
    El mozo me mira preocupado, sin entender de quien hablaba
    -Signorina, ma che l’uomo parla (¿De que hombre habla señorita?)
    Noto su desorientacion, y prefiero no continuar
    No, no, mi spiace!. In tavola è il suo consiglio. Sarà un altro momento. 
    (-No, nada, disculpe!. En la mesa esta su propina. Sera hasta otra ocasion.)
    El mozo sonrie y emite sus ultimas palabras
    -Grazie! Avere buon pomeriggio! (Gracias! Que tenga buenas tardes!)

    Le sonrio y me voy rumbo a la puerta, en eso miro el reloj, eran las 18.35, creo que es hora de volver a casa. Trato de caminar con tranquilidad, pero igual, sigo preocupada, observo el rostro de toda la gente que camina en la calle, como buscando una pista de ese hombre del local. Pero ninguno se parece a ÉL. Internamente me pregunto ¿Será real?.. Me preocupo por el grado de ilusión que pueda tener, aunque por lo visto, yo sola vi esa escena en el bar. Ni siquiera el mozo se dio por enterado ¿O se habra hecho el tonto?.. No entiendo tampoco por qué lo rodeaban varias mujeres alocadas ¿Será algun famoso? -de ser asi, no le iba a pedir un autografo, me parece algo muy patetico- pero si lo fuera, tendria que conocerlo, o no, puede ser algun actor de Italia y no conozco a ningun actor italiano, asi que es lo mismo que fuera un desconocido al igual que yo.
    ¡Ay basta!, no puedo estar preguntandome estas cosas a mi misma. Se excede de mi personalidad seria, fría y calculadora..

    Artista: Andy y Lucas
    Canción: Tus Miradas
     




    BLOG | Chica con ojos de ayer – De Florencia Lema